Tengo la suerte de que mi hijo siempre ha hecho los deberes del colegio sin mayor problema y más bien poco drama.
Esta situación nos ha llevado a los padres de hijos en edad escolar a hacer home schooling, que a veces funciona y otras veces no. Nos enfrentamos a esto padres sin ninguna experiencia ni estudios de docencia, sumando además el trabajo y la organización de la casa y a veces también sin paciencia y/o ganas.
A mi hijo le han dado un paquete de material de trabajo cada semana para que se envíe por correo a la profesora. Todos los martes hay clase virtual de 45 minutos en donde se ve con sus compañeros por una pantalla y es la interacción más cercana que tienen. Del cole se fueron casi todas las cosas buenas, quedó la responsabilidad de entregar tareas, los tiempos y la presión. Hasta en los niños más animados de ir al cole, hay falta de motivación a veces y a los padres se nos hace duro alcanzar a todo, pues el trabajo a tiempo completo está ahí, sigue la responsabilidad, las reuniones, los deadlines. O se cuida niños o se trabaja, pero ambas es imposible o posible pero mal hecho.
Por cierto… Las hojas y la tinta de la impresora están en sus horas más bajas.